CAPÍTULO 8
06 de Abril de 2020
La cabina estaba vacía, el chico esperaba nerviosamente a que entráramos, pero no lo podíamos hacer hasta tener las evidencias para poder cuestionarlo, Peralta llegó corriendo con la carpeta llena de fotografías. Ambos asentimos y entré.
- Hola, soy el detective Martínez, necesito hacerte unas preguntas.
- ¿Es otra vez por lo que le pasó a Lilia? - el chico parecía haber cambiado su nerviosismo por una mirada retadora.
- No, está vez necesitamos saber ¿por qué tu nombre coincide con las siglas de los chicos que fueron asesinados? - abrí la carpeta y esparcí las primeras tres fotografías de los tatuajes.
- Yo no tengo nada qué ver, pero por si también tiene la duda. - el chico se quitó la chamarra, alzo su playera mostrando sus costillas. - Tengo el mismo tatuaje.
- ¿Qué significa el tatuaje?
- Son las siglas de mi grupo de amigos, nos lo hicimos saliendo de la preparatoria. - se colocó de nuevo la chamarra.
Pasamos a las preguntas de rutina - ¿Qué hacía mientras ocurrían los asesinatos? - no hubo cómo comprobar que era inocente, pero tampoco había indicios de que él era culpable. Salí del cuarto con el folder, miré a Peralta negando con la cabeza, sabíamos que esto marchaba con el mismo paso que el primer caso de nuestras carreras.
04 de Abril de 2020
- Ahora recuerdo a estos chicos. - dijo Peralta mirando la foto del pequeño grupo de 6 personas. - ¿Recuerdas nuestro primer caso? - se acercó a Martínez.
- ¿El mismo que puso tu licencia de detective en juego? Sí, lo recuerdo. - volteó a ver la fotografía. - Ella es la chica que murió.
- Nunca encontramos nada porque movimos las cosas sin autorización.
- Éramos novatos y unos tontos, primera regla que nos dijeron...
- Y la rompimos. - Peralta suspiro.
El primer caso marcó una terrible racha para ambos detectives, donde la chica nunca tuvo la justicia que debía, dejaron que los chicos que estaban cerca de la escena movieran y limpiaran parte de la escena, sin saber ellos que habían ocultado parte de la evidencia, entre ellas, el material con el que murió la chica. El caso que destrozó a la familia, dejando a su padre en la cárcel por haber tenido entre sus pertenencias el objeto que se identificaba como el arma homicida. La madre, por otro lado, se quedó con su otra hija jugándose una vida a solas hasta el día de hoy.
20 de Junio de 2020
La revisión nos tomó horas, los invitados se veían enfadados por nuestra intromisión al revisar a todos y cada uno de ellos, salimos del Palacio rendidos, hasta que uno de los policías gritó a unos metros de nosotros, corrimos a revisar la zona. Peralta dio un gritó de enojo al saber que frente a ellos estaba la cuarta víctima, imposible creerlo, pero nada tenía coherencia, parecía que estábamos jugando al lobo y caperucita, el ángel se vestía de alguien que pertenecía a la fiesta y los mataría con algo que se identificaban en las reuniones, o eso los hacía creer.
Esto ha sido editado con la ayuda de Ingrid y Odette, sin ellas este texto estaría un poco polvoso, en fin, gracias por seguir leyendo querido lector <3