
Hija mayor de Cronos y Rea, la primera hija en ser devorada por su padre y la última en ser vomitada gracias a su hermano Zeus. Se sabe poco de esta diosa, ya que no le gustaba involucrarse en los conflictos del Monte Olimpo.
Hestia tuvo pretendientes, pero frente a la cara de Zeus, ella declaró que nunca tendría un amorío, siendo una de las diosas
vírgenes junto a Artemisa y Atenea, aunque Afrodita fue una diosa que no tuvo oportunidad de que
la convenciera o engañara para que la virginal
Hestia se permitiese un devaneo amoroso.
Hestia es considerada la diosa del fuego del hogar, ya que cuando su sobrino Hermes la visitaba para contarle sus historias y lo que sucedía en el Olimpo, reunía a los dioses para pasar el rato. Por eso decían que Hestia era el alma de la casa, ya que siempre se sentían en armonía. Ella es una diosa olímpica de la primera generación, pero su lugar lo cedió a su sobrino Dionisio, ya que le gustaba mantenerse en casa y tener su tranquilidad.
La leyenda de los griegos al venerar a los asnos en su día de culto es porque una noche de fiesta, Hestia dormía y Príapo, borracho, quiso violarla, pero el rebuzno del asno de Sileno la despertó y ella pudo huir de las mañas de Príapo. Otra leyenda dice que, en realidad, ella despertó y comenzó a gritarle a Príapo, a lo que él huyó.