Séptimo trabajo: El toro de Creta

Tras el intento fallido de matar a Heracles, el rey Euristeo manda a capturar al toro de Creta. Este toro se le conoce como el padre del minotauro, es un toro enorme, un semental blanco que saca fuego por la nariz. Este animal fue el símbolo del legítimo gobierno del rey Minos, donde le pidió ayuda al dios Poseidón de suceder el trono de Creta, por lo que él hace llegar un toro por el agua, la gente de Creta al ver a semejante toro acepta que Minos gobierne. Al estar maravillado de este semental, mata a otro y lo esconde entre su rebaño, pensando haber engañado a Poseidón, pero no fue así. Lo que Minos no sabía era los estragos que ocasionaría al dejar al toro libre.

Heracles se presenta ante Minos y le propone atrapar al toro que causa desastres en Creta, el rey acepta. Entonces el héroe va en busca del toro, siguiendo las pisadas, hasta que lo logra atraparlo y se monta en su lomo hasta conducirlo al mar Egeo, de ahí nadan para Micenas y se presentan ante el rey Euristeo. Éste queda asombrado por la belleza del animal, luego se lo ofrece a Hera, pero ella lo rechaza al saber que Heracles fue quien lo capturó y queda de nuevo en libertad, deshaciendo todo a su paso, hasta que Teseo lo mata cerca de la ciudad de Atenas.